La acción comienza en blanco y negro, como en un recuerdo. Klaus es un militar nazi que acaba de fallar un atentado contra Hitler. Desesperado, Klaus mata a tiros a sus hijos y posteriormente dispara contra su esposa embarazada, a la que deja malherida. Finalmente, intenta suicidarse, pero en el último momento no tiene el valor suficiente para apretar el gatillo, y huye en una motocicleta, con la que tiene un accidente... La acción continúa en Francia. Jean-Claude es un apuesto joven acomplejado por una malformación que presenta en el rostro. Jean-Claude vive con sus padres, Jacques Bergé, un hombre amnésico, encerrado en sí mismo y obsesionado con el arte egipcio, y Concepción, una mujer también encerrada en sí misma y obsesionada por las flores de su jardín, y que, según parece, padece una paranoia. En la misma casa viven además los hermanos pequeños de Jean-Claude: Robert, un niño sordomudo, y los gemelos Antoine y Raymond. La historia, relatada por el joven Jean-Claude a un comisario de policía, comienza con la llegada de Ursula, una bella joven que viene para encargarse del cuidado de los niños de la casa.